jueves, 16 de octubre de 2008

La inesperada partida de don Raúl González Allende

El autor de este blog en compañía de don Raúl Fernando González Allende.
Fotografía captada por mi hermano, en el interior del Museo Municipal de la ciudad de Bulnes, el 23 de agosto de 2008.


Esta mañana, en mi trabajo, recibí la penosa y sorpresiva noticia del fallecimiento de don Raúl González Allende, de quien no tenía noticias desde que le pude ver en el pasado mes de agosto. La información me la hizo saber, mediante una llamada a mi teléfono celular, doña María Cisternas, esposa de don Pedro Hernández Aguilera, nieto de don Pedro Aguilera Utreras, Veterano de la Guerra del Pacífico (1879-1884), matrimonio que conocí gracias a la extraordinaria labor de don Raúl González, persona responsable del Museo Municipal de la ciudad de Bulnes, y creador del mismo. Don Raúl fue un valioso ser humano, y fue el nexo y verdadero puente entre mi persona y mis ancestros nacidos en Bulnes siglos atrás. Gracias a su labor investigadora y al rescate de documentos eliminados por la parroquia de esa ciudad, pude tener acceso a información histórica sobre la familia Aguilera, los antepasados por línea materna de mi padre.

Don Raúl fue un hombre apasionado por la historia de su comuna; un incomprendido y hasta un loco para algunos, como me comentó en la oportunidad en que pude conocerle personalmente el sábado 23 de agosto de 2008. Yo le entendí perfectamente, pues a mí me apasiona el investigar y encontrar datos sobre mis ancestros, y he sido tratado de la misma manera. También tuvo el cariño, respeto y aprecio sincero de muchísmas personas cuya labor investigadora proporcionó alegrías y satisfacciones espirituales a quienes él pudo y quizo ayudar desinteresadamente.

Las circunstancias que rodearon su fallecimiento son muy tristes e inmerecidas. Basta leer las informaciones que aparecen en un medio local de la ciudad de Bulnes para enterarse de lo cruel que fue su partida:


"Aproximadamente a las 18 horas de ayer miércoles 15 de octubre, justamente a un mes del accidente que lo mantenía en estado grave, dejó de existir Raúl González Allende. Quien por años fue el Encargado del Museo Municipal y también su gestor. Esta triste noticia nos tiene consternados a todos los bulnenses que aún no nos conformamos con este injusto y trágico desenlace. Deja dos hijos, a su esposa y a su madre, quien ha tenido que llevar prácticamente sola todo el peso de este accidente y el cuidado de los nietos, un tremendo desgaste para una persona de avanzada edad y con escasos recursos económicos.

Quisiéramos ser respetuosos de este momento familiar tan doloroso, sin embargo no podemos dejar de señalar que hace algunos días, en este mismo medio hicimos público el grave estado de salud de Raúl mediante una declaración de Don Rogelio Astorga Vargas. El crudo titular decía: “Se nos muere Raúl” y precisamente eso era lo que estaba sucediendo. Aunque algunos no lo querían ver. Nuestro objetivo fue remecer a las autoridades municipales para que acudieran en auxilio de este funcionario que no estaba siendo atendido como su gravedad lo requería, pues no tenía previsión ni contrato de trabajo. Peor aún, era diabético, lo que complicó aún más su estado de salud. Tarde llegó la ayuda para Raúl, tarde reaccionaron en la municipalidad de Bulnes, de acuerdo al testimonio del propio Rogelio Astorga, quien se dirigió a hablar con el Alcalde Subrogante Ulises Aedo para que ayudaran a este funcionario abandonado y desatendido en un hospital en Chillán. El viernes la madre de Raúl, ya desesperada, por ver que cada día su hijo se encontraba con su salud más deteriorada, se acercó a Rogelio Astorga para pedirle que lo ayudara para tratar de cambiarlo de hospital ya que requería una atención de mejor calidad, ya que cada día su salud se iba deteriorando más y más.

Raúl no tenía contrato de trabajo, hace 6 años emitía boleta de honorarios, sin embargo ante la ley eso significa que existía una relación laboral, pero al momento de requerir las prestaciones de la ACHS, se encontró con la terrible noticia que no tenía derecho. Entonces fue tratado como indigente, siendo un trabajador y no cualquier trabajador, tenía premios y reconocimientos por su invaluable legado histórico, pero en la práctica de nada sirvieron. Es insólito que no hubiese nadie de la municipalidad junto a su madre para orientarla en esos engorrosos trámites. Es insólito que en Chile la gente se muere porque existe atención de primera y segunda clase. Y así aún algunos predican que la salud estatal está tan bien, cuando Raúl ni siquiera fue atendido con dignidad. Su madre dice que lo encontró con escaras y muchas veces no le hacían el aseo. En estos últimos días contaba con un Paramédico de cabecera que se le proporcionó tras los ruegos de su madre y mediante un acuerdo del concejo Municipal. Se acordó ayudar económicamente a su madre y cubrir los gastos de exámenes y tratamiento. Hoy nada de eso sirve, no habrá consuelo para su esposa, ni para su madre ni hijos, tampoco para sus amigos funcionarios que lo visitaron y se preocuparon de orar y ayudar un poco a su madre, tampoco Bulnes tendrá consuelo porque no existirá otro Raúl González Allende, que desentierre otra vez la historia escondida de Bulnes a cambio de nada. Dios en su infinita misericordia lo recibirá con los brazos abiertos y tendrá todos los cuidados que en esta tierra no pudo tener. Esperamos que se haga justicia en este caso para que nunca más en Bulnes vuelva a suceder una tragedia similar a vista y paciencia de quienes ejercen el poder."... (www.tejemedios.cl)


Con cristiana esperanza, aunque con el dolor natural de su prematura partida, esperaré el día en el que podré abrazar a don Raúl González Allende en la vida venidera, y nuevamente agradecerle su ministerio a favor de quienes buscan antecedentes que han permitido ligarnos con nuestros antepasados. ¡Hasta la vista, don Raúl!

Actualización: 20 octubre 2008
La prensa electrónica de la ciudad de Bulnes continúa publicando información acerca de don Raúl González Allende, ese querido bulnense, y se ha publicado un blog con fotografías de su funeral, al que pudimos asistir mi hermano y yo el día sábado 17. En la romería en el Cementerio tuve la oportunidad de expresar emocionadamente mis sentimientos respecto de la labor de don Raúl, que ha permitido encontrar a mis ancestros y, de paso, amar a esa pequeña ciudad de la Provincia de Ñuble. El blog no podía llamarse de otra manera: Raúl González Allende.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Estimado Coterráneo en la web encontré hace tiempo tu blog y lo he leído con emoción soy bulnense nacido y criado pero por cosas de la vida vivo en Santiago, quiero felicitar por ese DON de saber de dónde somos y quienes somos, lamentablemente conocemos y valoramos a las personas después de que ellos no están. Quiero felicitar a usted por sus historias que me hacen reflexionar y enorgullecerme de mi querido y amado BULNES. Soy creador del Grupo BulnesCity el cual esta totalmente invitado para enterarse y quien sabe de encontrarse con algún cercano http://www.facebook.com/home.php?ref=home#/group.php?gid=10727504052&ref=mf